Los mejores consejos sobre cómo escribir un trabajo fin de máster (como un profesional)

Escribir un trabajo fin de máster requiere mucha dedicación.

 

No se trata de un proyecto que puedas realizar en unos días.

 

El TFM es un trabajo que se caracteriza por su nivel de exigencia, por lo que tendrás que dedicar un horario estricto y escribir una parte cada día.

 

¿Sientes que, para ti, redactar un TFM no es asequible? Lee nuestros consejos y gestiona bien tu tiempo: seguro que puedes conseguirlo con una buena organización.

 

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6 consejos básicos para redactar tu TFM de forma fácil

1. En primer lugar: ten muy claro cuál es el objetivo de realizar un trabajo fin de máster

 

Antes de realizar un TFM, es buena idea saber por qué hay que escribirlo, ya que te ayudará a entender su nivel de exigencia y, además, al comprender muy bien el producto que debes crear, te será más fácil alcanzarlo.

 

En el trabajo fin de máster, deberías ser capaz de demostrar(te) todo lo que has aprendido durante la formación que has cursado, si bien no es necesario que esté ligado con todas las materias del máster (cosa que, además, podría ser imposible en ciertas disciplinas).

 

Se trata, por lo tanto, de un proyecto en el que demuestras que conoces en profundidad tu campo de especialización, por lo que debes entender el TFM como una oportunidad para seguir avanzando en algún aspecto que te interese.

 

Además, el TFM demuestra tu capacidad de síntesis y, como no, tus habilidades de escritura e investigación. Si unes todos estos elementos, tendrás claro que, desde la perspectiva de los docentes que lo corrigen, requiere poder valorar cuál es el resultado de tu trayectoria personal en el máster y, desde tu propia perspectiva, te permite desarrollar de forma precisa tus conocimientos en relación a aquellos contenidos que más te han llamado la atención o que más te interesan, llevando a la práctica todas tus competencias y habilidades para generar un proyecto único.

 

Por lo tanto, se debe tratar de un producto que está planteado desde una óptica en particular, desde la cual se tendría que apreciar tanto el vínculo existente entre lo que has estudiado y lo que te motiva a seguir aprendiendo como la relevancia de dicho tema para tu disciplina, de manera que el TFM aporte algún elemento diferencial a lo que ya se sabe.

 

En consecuencia, para realizar un buen TFM, tendrás que invertir tiempo.

 

2. Empieza cuanto antes a redactar tu TFM.

 

Como te habrás imaginado, el tiempo es una variable clave para crear un TFM de calidad. Por lo tanto, desde Proyecta tu proyecto el mejor consejo que podemos darte es que empieces cuanto antes a redactar tu TFM y no dejes para última hora el momento de comenzar a escribir tu trabajo fin de máster.

 

Si bien es cierto que habrás escuchado a algunas personas decir que han redactado su TFM en un día o en un fin de semana, la verdad es que la suerte no suele acompañar a aquellos que procrastinan de más. Y mucho menos cuando no tienes experiencia.

 

Además, si pretendes que tu TFM sea un primer hito para continuar posteriormente redactando un doctorado o realizando una publicación académica en alguna revista de alto impacto, lo cierto es que no te valdrá para nada si le has dedicado poco tiempo.

 

Por lo tanto, piensa estratégicamente: cuanto más esfuerzo dediques, mejor será tu producto (te lo aseguramos).

 

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Empieza tu TFM. ¡No pierdas tiempo!

3. Falta de tiempo: un obstáculo para redactar un (buen) TFM.

 

El tiempo necesario para redactar un TFM es una variable clave, como ya hemos explicado. Sin embargo, no tenemos unos baremos que puedan ayudarte a conocer cuánto tiempo necesitarás tu para escribir tu TFM.

 

Aunque quisiéramos, no podemos anticiparte si una hora diaria es mucho o poco para ti, ya que estos consejos son genéricos. Si quieres una previsión personalizada, puedes revisar nuestro apartado de training.

 

En Internet encontraremos muchas ideas inspiradoras para realizar el TFM rápido, pero te recomendamos no tratar de buscar velocidad y sí calidad.

 

Asegúrate primero de qué quieres hacer antes de ponerte a hacerlo, o de lo contrario tus avances no serán útiles.

 

Además, cuanto más eficaz seas, más te cundirá el tiempo, por lo que debes empezar por el principio.

 

4. Elegir un tema (fácil) para el TFM

 

Muchos alumnos buscan un tema fácil para el TFM, ya que así consideran que tendrán que invertir menos tiempo en su redacción.

 

Están en lo cierto: un tema perfecto para el TFM es aquel que te permite desarrollarlo, de manera que puedas ser original y, al mismo tiempo, avanzar con eficacia. Además, es necesario que tu tema sea actual y, por supuesto, esté relacionado con tu campo de estudios.

 

En Proyecta tu proyecto podemos ofrecerte consejos personalizados para la selección de un tema que reúna estos requisitos.

 

5. La introducción al TFM: ¿por qué es tan importante?

 

Si ya tienes el tema y has organizado tu planning de trabajo, escribir tu TFM debería ir sobre ruedas, siempre que tengas en cuenta algunas ideas básicas.

 

Tu introducción debe presentar adecuadamente la temática que investigas, y debe ser al mismo tiempo atractiva y sólida.

 

Introduce nueva información a los lectores, algo que desconozcan y pongan de manifiesto que lo que tu estudias en tu trabajo fin de máster tiene interés en la actualidad.  

 

No te olvides de reflejar los antecedentes del tema elegido, aportando citas relevantes y recientes.

 

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Dedica tiempo suficiente a una buena introducción para un TFM brillante

6. partes indispensables del tfm

 

El marco teórico es fundamental: todo TFM debe contar con un apartado de revisión de la literatura. Esta parte ofrece una sinopsis de hechos importantes, conceptos e información relevante relacionada con el tema.

 

Básicamente, es una recopilación de información procedente de diferentes fuentes académicas como revistas, libros, artículos, etc. Puedes leer aquí cómo deberías elaborarla.

 

En este apartado es imprescindible usar una cantidad significativa de citas directas, obtenidas de las fuentes académicas de las que se ha obtenido el contenido del TFM.

 

Después de revisar la literatura, es hora de explicar a sus lectores cómo  contribuye  tu TFM a complementar  la información ya disponible en las fuentes académicas.

 

Desarrollo del TFM: los apartados centrales difieren del tipo de trabajo, por lo que no podemos dar consejos específicos aquí, aunque puedes revisar en nuestro blog más a fondo.  En base al tema que hayas seleccionado, puedes completar la parte principal del TFM. Aquí puede explicar a los lectores sobre el tema, cómo recopiló la información, cómo de fiable es esta información, etc.

 

Finaliza con una conclusión sólida: muchos estudiantes no saben cómo escribir correctamente la conclusión de su TFM. En primer lugar, las conclusiones deben ser atractivas.  El propósito principal de la conclusión es resumir la importancia de tu tema de investigación y mostrar cómo su tesis ha hecho una contribución notable a tu campo de estudios.

 

Por lo tanto, la conclusión debe ser interesante y debe contener la lista de referencias necesarias para futuras investigaciones sobre el tema. Aquí te dejamos más consejos para preparar unas buenas conclusiones.

 

Esperamos que este post te haya ayudado. ¿Algún comentario? ¡Te leemos! Y, si quieres que te ayudemos, ponte en contacto con nosotros. 

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