Cómo escribir un TFG o TFM: 7 pasos para escribir un trabajo fin de grado o fin de máster (las 7 reglas de oro para redactar tu TFG o TFM)

Los trabajos fin de grado o fin de máster son, generalmente, el último requisito a cumplir para completar tu titulación. No obstante, puede que no sean la última vez que te enfrentes a la escritura académica, pues en muchos puestos de trabajo es necesario adquirir una cierta destreza redactando: redactar informes, preparar mails o cualquier otro acto de comunicación no se diferencia mucho de tu TFG o TFM.

Por lo tanto, es interesante que aprendas a escribir tu trabajo como paso previo para poder tener éxito en las funciones relacionadas con este arte.

Para algunos alumnos, escribir un TFG o TFM es tan simple como sentarse frente a su ordenador y comenzar a escribir. Sin embargo, si tu idea es que el trabajo tenga calidad, la planificación es imprescindible.

Si nunca antes ha escrito un TFG o TFM, o si tienes dificultades para redactar y deseas mejorar tus habilidades, desde Proyecta tu proyecto te recomendamos seguir una serie de pasos que te ayudarán en el proceso de redacción de tu trabajo fin de grado o fin de máster.

El primer paso para escribir un trabajo fin de grado o fin de máster es definir qué tipo de proyecto estás escribiendo. Hay cuatro categorías principales en las que se pueden agrupar los trabajos fin de grado o máster:

-       TFG/TFM de revisión bibliográfica

-       TFG/TFM de revisión sistemática

-       TFG/TFM con propuestas de intervención

-       TFG/TFM de innovación

Saber qué tipo de TFG/TFM estás tratando de escribir te ayudará a decidir sobre el tema y estructurar tu proyecto de la mejor manera posible. Por lo tanto, el primer paso es conocer qué tipo de trabajo es para poder pasar el siguiente paso: la selección del tema de tu TFG o TFM.

Como te habrás imaginado ya, no puedes escribir un TFG o TFM sin tener una idea sobre la que redactar tu TFG o TFM. La lluvia de ideas o brainstorming es un proceso imprescindible para acotar el objeto de investigación y es el proceso en el que se te ocurren los posibles temas de tu proyecto.

Simplemente necesitas sentarte y pensar en ideas durante esta fase. ¿Fácil, no?

• Anota todo lo que se le ocurra, ya que siempre podrás reducir estos temas más adelante.
• Utiliza la agrupación en esquemas o mapas mentales para intercambiar ideas y proponer una idea más clara sobre la que desarrollar tu TFG o TFM. Esta labor implicará escribir sobre tu tema o idea principal en el centro del papel y relacionarla con conceptos afines.
• La lluvia de ideas puede ser una excelente manera de desarrollar un tema para realizar tu TFG o TFM y reconocer las conexiones entre los aspectos clave del tema sobre el que te planteas realizar tu trabajo.

Una vez que tengas una lista de posibles temas, es hora de elegir el mejor que responda a tu pregunta de investigación. Es esencial elegir un tema que no sea ni demasiado amplio ni demasiado acotado, de manera que puedas cubrir los aspectos principales en tu proyecto con un nivel suficiente de concreción.

Por esta razón, cuando escoges el tema de tu TFG o TFM es necesario que seas consciente de la extensión total que deberás cubrir, ya que te ayudará a anticiparte a los posibles problemas que pueden darse si escoges temas demasiado abiertos. Ahora sí, estás preparado para avanzar al siguiente paso con tu proyecto.

Una vez que hayas realizado tu lluvia de ideas y hayas elegido tu tema para escribir tu TFG o TFM, es posible que debas investigar un poco para conocer mejor esta temática y poder plantear una buena estructura.

Te recomendamos consultar bases de datos y fuentes de calidad para que la información de la que dispones esté actualizada. Este paso te ayudará a delimitar qué investigarás más adelante.

El índice es el apartado más importante de tu TFG o TFM, pues recoge los aspectos que quieres trabajar.

Dicho de otra manera, en el índice asientas las premisas básicas que te planteas abordar, por lo que es necesario que le des la importancia que tiene. En conexión con el índice, no debes olvidar un título llamativo que resuma los aspectos principales que tratarás en tu trabajo fin de grado o máster.

Como consejos, te recomendamos:

-       Sé exhaustivo y busca una conexión clara entre el título y el contenido.

-       No superes las 12 palabras. Un título corto es mucho más expresivo.

-       Cuida los tiempos verbales.

El siguiente paso es describir lo que vas a escribir. Esto significa que, básicamente, tienes que profundizar sobre el índice y plasmar los puntos que tratarás dentro de cada epígrafe. Es el momento de apuntar posibles autores que puedes incluir en cada apartado o las ideas clave a las que darás fuerza en tu proyecto.

Como te habrás imaginado, esto significa que tienes que saber exactamente de qué va a tratar cada uno de los apartados de tu TFG o TFM antes de escribirlos. Como ideas, te damos las siguientes:

1. No mezcles conceptos en los diferentes apartados para evitar confundirte. Menos es más, aboga por la sencillez.
2.  Asegúrate de que hay conexión entre párrafos para que el lector comprenda cómo fluye el artículo de una idea a la siguiente.
3. Introduce citas y ten en cuenta qué normas te han dado para elaborarlas correctamente.

Una vez que tengas el esquema, es hora de comenzar a escribir tu TFG o TFM.

Escribe basándote en el esquema en sí, desarrollando su esqueleto básico para crear un ensayo completo, coherente y claro.

Tendrás que revisar periódicamente lo que escribes, por lo que hay algunos aspectos a tener en cuenta:  

• Lee detenidamente lo que escribes y piensa cómo puedes darle mayor claridad, consistencia y estructura.
• Introduce cada punto de forma adecuada para que se comprenda qué ideas desarrollas dentro de cada punto.
• Asegúrate de que la lectura es dinámica y las ideas están adecuadamente conectadas.
• Vuelve a leer la introducción y la conclusión de cada apartado y revisa que cualquier persona que lea uno de tus puntos pueda entender las ideas que has abordado en tu trabajo.
• Incorpora aspectos interesantes que puedan enganchar a tu lector.
• Redacta un apartado de conclusiones sólido que refuerce tus ideas principales.  

Una vez que tu TFG o TFM ensayo está redactado, comienza la revisión.  Lee detenidamente el trabajo buscando errores ortotipográficos. Además, debes revisar los aspectos formales para que la maquetación sea la más adecuada. En especial, asegúrate de que:

-       Las citas están correctamente dispuestas.

-       La tipografía, interlineado y estructura de página se mantienen a lo largo de todo el trabajo

-       No hay errores de estructura, no repites términos y, sobre todo, no has plagiado ni copiado ideas.

Ahora sí, todo a punto para entregar tu TFG o TFM. Esperamos haberte ayudado con estos consejos pero, si quieres pasar al siguiente nivel, en Proyecta tu proyecto disponemos de un training especial para ayudarte en tu trabajo, adaptado a tus necesidades. ¿Qué esperas para conocerlo?

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