Cómo crear una presentación para un TFG o TFM efectiva

¿Tienes que presentar próximamente el TFG o TFM y necesitas consejos para realizar una presentación que capte el interés de tu tribunal?

En Proyecta tu proyecto tenemos las claves que la presentación de tu TFG o TFM se convierta en todo un éxito.

Sigue leyendo y capta cuáles son las características esenciales de una buena presentación para un proyecto y descubre cómo puedes impresionar a tu tribunal, incluso aunque tu presentación sea la última del día o tu tema no sea el más interesante.

En primer lugar, si estas preparando la presentación de un TFG o TFM, ¡enhorabuena!

No todos los alumnos llegan hasta aquí y sabemos que el camino es más duro de lo que parece. Sin embargo, si aún te queda la exposición del TFG o TFM como último paso, te recomendamos que reserves fuerzas para esta última prueba: ¡aún no has acabado!

Presentar o exponer un TFG o TFM con éxito no es difícil para todos los alumnos, pero son muchos los factores que pueden influir en que te cueste más trabajo enfrentarte al tribunal.

En especial, hay alumnos que tienen miedo a hablar en público y, en especial, temen a la presentación de su TFG o TFM, alumnos que no han presentado nunca ningún trabajo y alumnos que sienten una gran inseguridad ante esta última prueba.

Si estás leyendo esto, tu eres de los valientes que quieren resolver sus miedos y tener una presentación exitosa del TFG o TFM. Y te diremos algo: si sigues estos consejos seguro que lo consigues.

Como te habrás imaginado, en la presentación de un trabajo fin de grado o máster no solo importa lo que presentas, sino cómo lo presentas.

En esta labor, un buen diseño y planificación de la presentación de tu proyecto es imprescindible y, para ayudarte con esta tarea, te dejamos siete consejos clave.

La idea central de tu TFG o TFM es clave en tu presentación. Todos los trabajos académicos tienen un concepto central o un objetivo principal que tiene que estar bien claro en el cuerpo de tu presentación. Tendrás que recordar esta idea clave varias veces, pues te ayuda a construir el hilo conductor de tu presentación.

Quizás te interese leer: El hilo conductor del TFG o TFM.

Antes de que comiences a preparar tu presentación para el TFG o TFM, es imprescindible que tengas en cuenta cuál es tu idea central y la definas de forma adecuada.

Además, debes construir tus diapositivas una a una: no esperes al final para incluir infografías, diagramas o imágenes, ya que esto podría afectar a la coherencia de tu presentación de TFG o TFM.

Es necesario que cada idea esté reforzada por estos elementos y que evites hacer la presentación sin orden: todo ello podría afectar a tu exposición.

La presentación de la defensa de tu TFG o TFM habitualmente tendrá lugar en un entorno formal donde varios docentes quieren conocer en qué medida has cumplido con los requisitos que tenía que reunir el trabajo desde un punto de vista formal y de contenido.

Por lo tanto, en tu presentación debes demostrar que tu trabajo es sólido y demuestra lo que has aprendido en el grado o máster que has cursado y estás preparado para seguir investigando en futuros pasos.

Para demostrar que has adquirido estos conocimientos, necesitas una buena presentación de TFG o TFM.

Si tu presentación es vaga, poco estructurada y su apariencia visual es mediocre, estás dando a entender que no has dedicado tiempo en preparar tu defensa y el tribunal podría asumir que, quizás, tu trabajo no sea tan bueno o que no te tomas en serio tu presentación del TFG o TFM.

Por lo tanto, ten presente qué es más adecuado para tu tribunal, teniendo en cuenta qué fuentes, qué imágenes y qué tipo de diseño puede llamar más la atención a esta audiencia.

Si tienes dudas con un recurso (por ejemplo, si crees que una imagen puede ofender) descártala. Tu presentación debe ser correcta para todos los que asistirán a la exposición de tu TFG o TFM.

Evita las notas de humor: se trata de una presentación académica y formal, por lo que no debes perder el tono serio y riguroso.

Aunque haya muchas ideas a lo largo del TFG o TFM, en la presentación tienes que centrarte en las más relevantes y centrar el tema en aquellos aspectos que tienes que destacar.

El tiempo de la presentación del TFG/TFM será limitado, por lo que no debes irte por las ramas: céntrate en lo importante y dale el valor que tiene, destacando el peso de tus argumentos.

Para dar fuerza a tus ideas trabaja en cada diapositiva solo una de ellas.

Impide la sobrecarga de datos e información: pocas palabras son suficientes para destacar lo importante.

Además, unas diapositivas simples garantizan que el tribunal está concentrado en las ideas que vas comentando en cada momento, sin que haya distracciones, lo que te ayudará a mantener la atención en lo que comentas.

Trata de seleccionar solo las ideas que son relevantes y exprésalas en pocas palabras en tu presentación del TFG/TFM.

Sabemos que dispones de mucha información sobre el tema que has investigado durante la realización de tu TFG o TFM, pero ningún tribunal quiere leer bloques y bloques de texto: necesita que tu lo expliques.

Si de verdad quieres demostrar que sabes sobre el tema que has investigado en tu trabajo fin de máster o grado, limita el texto de la exposición al mínimo y dale vida con tus palabras.

Tu tribunal debería escuchar mucho más de lo que lee.

Por lo tanto, cuando estás configurando el contenido de cada diapositiva, ten en cuenta el enfoque de la diapositiva y ayuda a tu audiencia a concentrarse solo en los elementos imprescindibles.

Una vez que hayas elegido las palabras correctas, el texto de la diapositiva debe verse bien para ofrecer el máximo impacto durante la presentación de tu TFG o TFM.  Para ello, en primer lugar, el texto debe ser fácil de leer. 

• Usa un tamaño adecuado. No obligues a los miembros del tribunal a guiñar los ojos o buscar las gafas para ver lo que has puesto en la diapositiva.

• Elige colores que contrasten bien entre sí y el texto (a un tamaño adecuado) parecerá saltar de la página. 

Otro factor clave a considerar es el entorno en el que realizarás la presentación. ¿Es luminoso, con mucha luz natural o más oscuro? ¿Es pequeño o grande?

Comprender el tamaño, la forma y la iluminación del lugar en el que expones te ayudará a escoger el diseño más apropiado. 

Si puedes, visita antes el espacio en el que vas a exponer: te dará idea de qué colores pueden ser más adecuados y qué tamaño de letra es necesario para que tu presentación sea un éxito.

Tendrás que aportar resultados que refuerzan tu trabajo y muestran que has investigado, por lo que no puedes dejarlos fuera de las diapositivas de tu TFG o TFM. 

Destaca las cifras para que tu audiencia pueda verlas con claridad: evitarás distracciones al decir números, que sobrecargan a los espectadores.

Por otro lado, solo puedes decir las cifras verdaderamente importantes: no des detalles superfluos o el Tribunal estará deseando que te vayas (o que te calles).

Además, si tienes que presentar números, recuerda los elementos visuales (por ejemplo, gráficos, infografías o cualquier forma de representación que los haga más comprensibles e intuitivos).

La coherencia de tu presentación es clave para recoger los puntos clave de tu trabajo. Sigue la estructura de forma lógica y ensaya hasta que estés seguro de que todo lo que dices tiene importancia para llegar a las conclusiones de tu trabajo.

Como te habrás imaginado, la presentación de tu TFG o TFM es muy importante: debes dedicarle tiempo.

Los colores de la presentación deberían seguir un esquema estable: no cambies de una diapositiva a otra tu esquema, ya que podrías distraer al tribunal y perderlos.

¿Has seguido todos los consejos? Enhorabuena: estás preparado para impresionar al tribunal y que tu exposición sea todo un éxito.